¿Buscas fotógrafo de boda? ¡Te interesa!

Una pasión: La fotografía, las bodas, los momentos únicos, el sentimiento, la emoción, la felicidad, la complicidad… que pasan a convertirse en Álbumes de Boda. Llevamos ya dos años contando con ella en la Feria DeBoda de Valladolid y hoy vamos a conocerla un poco mejor, ya que durante la Feria, casi no tenemos tiempo para charlar; son dos días de frenético trabajo para todos.

Sólo conocíamos de ella su Stand en la Feria, las fotos que va publicando en su blog y redes sociales y aquellas que comparte con nosotros de vez en cuando. Yo hoy me reencuentro con mi antiguo oficio, los Reportajes de Boda, muchos años realizando reportajes, muchos compañeros que han pasado por mi lado admirando, compartiendo y disfrutando de este gran oficio y creo reconocer, desde mi modesto entender, cuando un fotógrafo destaca en lo que hace y si te permites ver las fotografías de Patricia Grande podrás ver ese alma especial en todas ellas. Calidez, estilo, profesionalidad, entusiasmo, entrega, pasión,… son cosas que ves en sus trabajos. ¡Me encanta su forma de mirar y contar con imágenes una boda!

Hablamos de bodas, de fotos y de su trabajo principal: los reportajes de boda. De sus gustos y aficiones. Porque si algo es importante a la hora de buscar fotógrafo es que además de que nos gusten sus fotos y su trabajo, sintamos ese feeling que hace que nos encontremos a gusto a la hora de ponernos frente al fotógrafo y su cámara. Creedme que esto último es extremadamente importante, casi tan importante como todo lo demás. Cuando conectas con una pareja, disfrutas de tu trabajo y haces grandes cosas. El fotógrafo casi se convertirá en tu sombra, a veces una sombra que ni verás, otras estará en esos momentos que nunca olvidarás.

¿Qué hace Patricia Grande cuando deja la cámara en la mochila? ¿O eres de las que van siempre con una cámara encima? Sin contar el móvil claro ¿o lo contamos también?

Bueno, no siempre llevo la cámara encima, ayuda a ser objetivo en tu trabajo desconectar de vez en cuando, aunque es difícil, la fotografía para mí no es solo una profesión, sino una manera de vivir. El móvil lo utilizo pero no me apaño igual, acostumbrada a las posibilidades que te ofrece una cámara profesional, reducirlas al uso del móvil, me resulta complicado.

¡Nos casamos el año que viene y buscamos fotógrafo! Una de tantas frases con las que las parejas que se van a casar comienzan las reuniones con los fotógrafos… ¿Si yo me casase el año que viene qué recomendación me darías para encontrar el fotógrafo para mi boda?

Las ferias son una excelente manera de hacerse una idea de cómo está el sector profesional. Suelen exponer fotógrafos de diferentes estilos y tienes la oportunidad de conocerlos, charlar con ellos y ver su trabajo, tocarlo, sentirlo. Para mi, es la mejor forma. Otra de las opciones es Internet, aunque lleva más tiempo acertar, puedes enamorarte del trabajo y el estilo de un fotógrafo, llegar a la reunión y tener muy poco feeling con él. Puede ocurrir.

Si pudiéramos olvidarnos todos de la palabra ‘presupuesto’ para no ser esta la razón por la que se decide una pareja que se casa a contratar un fotógrafo ¿En qué debiéramos fijarnos cuando estamos delante de un fotógrafo y su trabajo para decidirnos por él o ella?

Pues hay varias cosas que deben ser importantes a la hora de decantarnos por un fotógrafo. La primera, que nos enamore su trabajo, que nos sintamos identificados con él, que nos imaginemos delante de su objetivo. La segunda y no por ello menos importante, que tengamos buena sintonía con él, que nos encontremos tremendamente cómodos. No hay que olvidar que no deja de ser un extraño que pasará con nosotros 12 de las horas más importantes de nuestra vida y aunque es un profesional y sabe como debe comportarse para conseguir captar la emoción de ese día, necesitamos tener buena química con él. Y la tercera, que sepa contar la historia de una forma honesta y natural, para después plasmarla en un bonito libro que mantenga siempre vivo el recuerdo de ese día.

Una boda termina siempre igual que todas las demás: casados ellos y cansados nosotros de dar lo máximo. Cuando a mí me preguntaban mis amigos ¿Qué tal la boda? Yo les contestaba en broma: Bien, se han casado como todos las demás. Lo que cambia es la pareja y eso lo hace especial, en ocasiones también hace el lugar incluso la hora del día. ¿Qué es lo que hace especial a una boda además de la pareja?

Bueno, la mirada del fotógrafo es esencial. Nosotros tenemos la capacidad de convertir un lugar que apenas puede tener atractivo, en algo increíble y sorprendente y también todo lo contrario, convertir algo bello en algo de mal gusto. Cada fotógrafo interpreta lo que ve de una manera propia y diferente, y ahí reside la cuestión de saber elegir bien y con criterio a nuestro fotógrafo. Por otro lado, la luz es un aspecto esencial. Ella es con la que trabajamos los fotógrafos que como yo, la usan sin apoyos de flashes que tienden a desnaturalizar la imagen. Trabajar con luz natural es a veces muy complicado, pero también ayuda a pasar desapercibido en un evento en el que el fotógrafo, siempre va a llamar la atención aunque su misión sea no hacerlo.

¿Cómo sería una boda perfecta, para un resultado perfecto para Patricia Grande viéndolo del lado del fotógrafo?

Para mi una boda perfecta es aquella en la que hay una armonía general: La complicidad entre los novios y los invitados, la coherencia en las localizaciones que unificará el estilo de la boda, la alegría que se respire en el ambiente, la buena sintonía con el fotógrafo y por supuesto la luz del momento.

Preguntas rápidas: ¿Boda de mañana o de tarde?, ¿Preboda o Reportaje de los preparativos? ¿En ciudad o campo? ¿Reportaje el día de la boda o postboda? ¿Fotografía nocturna o de día? ¿Novio o novia? ¿Posado o robado? ¿Ceremonia en Iglesia o finca? ¿Religiosa o civil? ¿Álbum o archivos?

Preboda y reportaje de los preparativos, son distintas; campo y ciudad, ambas tienen su carácter; reportaje el día de la boda y postboda; fotografía diurna, aunque la nocturna bien iluminada tiene mucho encanto; novio y novia por favor, no puedo elegir; robado siempre; civil y religiosa, quien puede resistirse a ambas, hay iglesias que enamoran y las ceremonias civiles en fincas al aire libre son maravillosas; álbum siempre, pero no cualquier álbum, uno especial y único siempre producido de forma artesana.

Dicen algunos que si lo fotografías no lo vives. ¿Crees que eso es cierto? Yo me acuerdo de un par de bodas en las que estaba obnubilado con todo y un par de casos en los que dejé de hacer fotos y me emocioné yo también, recuerdo un gran álbum de boda gracias a eso.

Eso no es cierto, lo vives muy intensamente, tanto como los novios y más, pero de otra manera. Ríes, lloras, te emocionas, disfrutas. Yo empatizo mucho con mis parejas y también con las familias y los invitados, quizás por ello conecto tan bien con la gente.

Una vez que te dicen, hemos pensado que tú serás la fotógrafa de nuestra boda ¿Cómo preparas la boda con los novios? ¿Qué recomendaciones les das para que todo se vea tan bien como en las fotos que vemos?

Bueno, antes de nada, cuando me dicen que quieren que sea la fotógrafa de su boda, se me pone la piel de gallina, no lo puedo evitar. Te hace sentir especial formar parte de un día tan importante con dos personas que están depositando una confianza absoluta en ti y tu trabajo.

Sobre como preparo la boda con ellos, mira, les realizo una serie de preguntas acerca de la boda, para saber quienes serán las personas esenciales que les acompañaran ese día. También les pregunto acerca de los detalles que han preparado para sorprender a los invitados. Por otro lado, me tienen para resolver cualquier duda o sugerencia durante todos los meses antes del acontecimiento, y por supuesto después.

En mi caso todo es muy personalizado, pues soy yo la que gestiona todo: el trato con la pareja, la realización del reportaje, la edición, el retoque, la maquetación del álbum. No subcontratar a alguien para que haga ese trabajo, me parece que hace que todo sea más íntimo y personal para la pareja, incluso más fácil y cercano.

Este año en DeBoda ha sido el año que más fotógrafos hemos tenido en la Feria DeBoda ¿Cómo ves esta situación dentro del sector de la fotografía? ¿Crees que las parejas lo tienen ahora más difícil o más fácil para decidirse?

Pues creo que sí la verdad, cada vez hay más gente y hay que saber filtrar. Están los fotógrafos de boda que se dedican a ello por vocación y los que lo hacen por ganar dinero y no sienten ningún respeto. Yo sinceramente empecé por ganar dinero, no voy a mentir, sin embargo, ahora no pueden gustarme más. Disfruto como una enana en cada una de mis bodas, me encantan. Sé que es duro, pero también muy gratificante, sobre todo cuando te llaman para decirte lo mucho que les ha emocionado tu trabajo y lo bien que has sabido captar lo que sucedió ese día.

Llevas ya dos años participando en la Feria y si todo va bien, será tu tercer año. ¿Cuál fueron los motivos que te trajeron a la Feria DeBoda?

Pues llevaba varios años trabajando en Madrid, y me apetecía afianzar mi marca como empresa en la zona en la que me crié. Yo soy de un pueblecito de Valladolid, aunque llevo muchos años viviendo fuera. Valorando varias opciones, esa fue la que más me convenció, y el resultado no ha podido ser más satisfactorio, tanto el primer como el segundo año he llenado mi agenda de bodas y además he conocido a gente maravillosa. De la experiencia me llevo además no solo a clientes, sino también amigos, así que el próximo año seguro repetiré.

 Hace 17 años cuando comenzó DeBoda, internet no era lo que es ahora, en la actualizad puedes encontrar en internet muchos recursos y a pesar de eso llevamos años trabajando en crear un certamen importante en Castilla y León. Tú que lo vives desde dentro ¿Crees que las parejas necesitan veros en un ‘cara a cara’?

Sin duda para mi es importantísimo. Tiene que haber conexión entre la pareja y el fotógrafo. El tiempo me ha enseñado que conectar con la pareja hace que interpretes mejor su personalidad y sus gustos, para que luego esto quede reflejado en el reportaje. Yo por lo menos, no entiendo trabajar de otra manera. Sé que hay agencias en las que contratas con una persona, otro te hace la boda y otro te retoca las fotos. Conoces al fotógrafo el mismo día, y realmente no has tenido ni una breve charla para sintonizar con él, creo que no es la manera ideal de trabajar.

Yo recuerdo un par de anécdotas que siempre cuento. Me tocó vestir entera a más de una novia porque no había nadie en su casa y ella sola lo tenía difícil. Y es que los fotógrafos somos los que siempre estamos ahí. Sabemos de corbatas, de gemelos, de cómo colocar el velo y estirar la cola… ¿Qué momento tienes en mente, que siempre cuentas, si es que se puede contar?

Jajaja, he tenido momentos muy divertidos, y también de mucha tensión al ver a los novios muy nerviosos. Anécdotas miles, pero si tengo que destacar alguna, bueno, hace mucho tiempo, en una boda, la pareja contrató a Chiquito de la Calzada para que amenizara la sobremesa de la cena, yo me lo pasé pipa claro. ¡¡Quién no es fan de este hombre!!

 Siempre hay una foto que no debe faltar en un álbum de boda. ¿Cuál es esa que nunca debe faltar en tu álbum?

Una bonita y sencilla foto de pareja en la que se les vea tal y como son, y que por supuesto, refleje la emoción que sintieron ese día.

Yo quería ser informático o algo que tenga que ver con los ordenadores, no vengo de familia fotógrafa, quizás algo amantes de las fotos caseras. Empecé haciendo reportajes de boda casi por casualidad y ahora hago fotos normalmente a ‘cosas’: productos y vivo pegado a los ordenadores. ¿Qué pasó por tu vida para llegar a ser una profesional de la fotografía?

Como ya comenté al principio de la entrevista, yo no llegué a ser fotógrafa por casualidad, la fotografía siempre ha estado presente en mi vida de una forma muy intensa. En mi casa, mis padres me contagiaron desde muy pequeña su inquietud por el mundo del arte. Mi padre pintaba al óleo a menudo y mi madre me llevaba de la mano a ver innumerables exposiciones. Como no podía ser de otra manera, terminé haciendo la carrera de Bellas Artes, y al finalizar, me dí cuenta de que la fotografía, era lo que me hacía sentir más completa. Trabajar con las emociones de la gente de una forma directa, me resultaba adictivo. Así que me embarqué definitivamente en lo que a día de hoy, no puede ser más que la mejor decisión profesional que he tomado en mi vida, y me siento feliz por ello ;D

Recuerdo cuando el pre boda era una novedad y el post boda se comenzaba a escuchar ¿Qué novedades tienen ahora las parejas para 2016?

Uy, esto avanza rápido, ahora se lleva mucho personalizar las bodas al máximo. Atender a cada detalle, las flores, la decoración, la iluminación, la fiesta. Hay gente que contrata empresas de wedding planners para ello, lo cierto es que el resultado es espectacular. También se llevan mucho las bodas de estilo campestre en fincas y ahora parece que llegan las de estilo industrial, en naves o antiguas fábricas que bien decoradas quedan impresionantes. Para mi, todo lo que sea hacer cosas nuevas y diferentes, me encanta!

Haciendo mención al dicho: ‘Detrás de un gran profesional hay un gran equipo’. (No es así, pero nos vale) ¿Quién hay detrás de Patricia Grande? ¿Quién forma parte de tu equipo?

Yo cuido mucho la gente con la que trabajo. No me vale cualquiera, soy exigente a todos los niveles. La persona que trabaja conmigo no solo tiene que tener un equipo profesional igual o similar al mío, sino que además, debe tener al menos varios años  de experiencia en bodas. Todos trabajan como fotógrafos por cuenta propia y lo que para mi es más importante, sienten devoción por lo que hacen. No me vale alguien que coge una cámara de vez en cuando y con mucha suerte y disparando como un loco, consigue 3 fotos bonitas. Con el laboratorio y el taller de encuadernación, me sucede lo mismo, son grandes profesionales que trabajan con mucho cariño cada encargo que realizan.

Hace un tiempo salió una noticia en la que decía que una pareja pidió a su fotógrafo de boda que hiciera lo que quisiera, pero que las fotografías las hiciera con el Iphone. ¿A ti te han pedido cosas ‘fuera de lo común’?

Pues de momento no la verdad, me han pedido infinidad de cosas, pero no me han parecido nada extraño.

Después de años, tampoco muchos, que somos jóvenes. Reconozco que los fotógrafos de boda, los buenos, los que como tú se entregan en cada boda que hacen, están hechos de otra pasta y ven cosas que los demás no ven. ¿Qué pasa cuando una pareja ve su álbum por primera vez, viendo lo que ellos no vieron y tú sí?

Bueno, fíjate que esa es una de las cosas que más me comentan. Las fotografías de los momentos que para ellos pasaron desapercibidos, bien a consecuencia de los nervios, bien porque no estaban presentes, son muy significativas para mis parejas. Se emocionan y las valoran mucho, me dan las gracias por ello y yo me siento más feliz que una perdiz!

Hay muchas noticias últimamente que hablan sobre la masificación de los ‘smartphones’ en las bodas. Yo recuerdo cuando iba a bodas y nadie sacaba el teléfono, ni en el coctel, bueno… algún cuñado pesado con cámara nueva. Hemos llegado al punto que incluso hay parejas que piden a los invitados que guarden su teléfono. ¿Cómo llevas esto? ¿Alguna vez te molestó impidiendo sacar alguna foto?

Sinceramente, eso es algo con lo que tenemos que lidiar en cada boda. A veces lo llevo bien, a veces lo llevo mal. Cuando lo puedo solventar, no me importa, cuando entorpecen el paseo de la novia hacia el altar, y me veo negra para sacar una buena toma, lo paso fatal. A veces lo utilizo y hago la foto en la que se ve tanto a la novia como a los invitados, refleja lo que sucedió en ese momento, pero hay ocasiones en las que estropean la imagen. Yo comprendo que quieran hacer la foto y me parece bien, pero hay que ser considerado, y no ya por nosotros, sino por los novios. Hay tiempo para todo y espacio para todos.

Desde hace algún tiempo se están ‘enfrentando’ dos tipos de reportajes el ‘reportaje posado’ y el ‘reportaje robado’ El primero se ve como algo ya pasado y el segundo como una nueva manera de hacer las cosas. ¿Cuál es tu postura, dónde te encuentras mejor?

Sin duda en el robado. ¿No es más bonito ver un reportaje de boda que refleje naturalidad y emoción y en el que no se perciba la presencia constante del fotógrafo, que uno en el que en cada foto las personas aparezcan mirando al fotógrafo como si él fuera el protagonista? Hacer un retrato mirando a cámara es bonito, pero hasta ahí. Hablamos de reportaje social, no de moda por ejemplo, ahí las cosas cambian.

La preparación de un buen fotógrafo viene dada de ver mucho, leer mucho, ver mucho,… y no dejar de inspirar. Una vez un fotógrafo me dijo: Borja, un fotógrafo para saber expirar tiene que saber inspirar. ¿De dónde inspira la creatividad Patricia Grande? ¿Quién son tus referentes?

Yo estudié bellas artes, y eso se aprecia tanto en mi trabajo como en mi manera de exponerlo. Mis referentes van desde pintores y escultores, hasta fotógrafos, diseñadores e ilustradores. La lista es larga y no hay que dejar de buscar referentes, estamos en continua evolución, y la inspiración surge por influencias muy diversas. Me encanta la música y por eso canto y toco algunos instrumentos, devoro exposiciones de diversa índole y viajo todo lo que puedo a lugares que me inspiren por su arquitectura, su paisaje, su gastronomía y su gente. Me gustaría ser siempre como una niña pequeña que no para de asombrarse al descubrir cosas nuevas ;)

¿Quién es tu fotógrafo de boda por excelencia? ¿Tienes uno?

Decantarme por uno me resulta imposible. Por enumerar a los esenciales, Sean Flanigan, Sara Byrne y Thierry Joubert. Hay muchos que me apasionan, soy incapaz de elegir a uno solo!! Todos tienen algo y de todos se aprende.

Tengo amigos que me dicen que el día de su boda confiaran, algo tan importante como su reportaje de boda, a un conocido, porque las fotos de boda no son importantes para ellos. No sé si lo dicen por fastidiarme, pero… ¿Qué hacemos con ellos Patricia?

Me he encontrado con esto en varias ocasiones, y hay que respetarlo, al final es una cuestión de prioridades. Si a ellos les vales así, perfecto. Después puede que se arrepientan o puede que no, depende de su nivel de exigencia.

Los fotógrafos tendemos a pasar por nuestra cámara todo lo que vemos, lo que nos preocupa, lo que sentimos, eso que queremos gritarle al mundo. Nuestra visión personal y que representamos con fotos. ¿Cómo son esas fotos? ¿Podrías enseñarnos algunas fotografías que hablen de ti y no sean de boda?

Claro! Por ejemplo, hay una serie de retratos que hice hace algún tiempo sobre los porteros de edificio en Madrid que es muy significativa para mi. Una profesión de las de toda la vida, que se ha ido paulatinamente perdiendo en el tiempo. Fue una bonita experiencia no solo hacer las fotos, sino hablar con ellos sobre la importancia de su trabajo en una comunidad de vecinos.

No sé si me quedo algo… algo que creas que es importante contar sobre ti, tu trabajo, algo que deben conocer las parejas,…

Mi trabajo es muy emocional y habla por si mismo, así que invito a tod@s a visitar mi página web, además se podrán entretener un buen rato con otro tipo de reportajes que no son exclusivamente de boda.

Por: Borja Merino Fotógrafo